Paga pues!!!

Vivimos en una economía de libre mercado, donde la oferta y la demanda nos rigen casi dictatorialmente. Los organizadores de conciertos lo saben y por eso se aprovechan de lo sedientos y hambrientos que estamos de conciertos internacionales de bandas de nivel para sacarnos, si pueden, hasta los ojos con el precio de las entradas.
No nos hagamos los tontos. Organizar conciertos es un NEGOCIO. Es invertir dinero para obtener la máxima ganancia posible. A los organizadores no les interesa en lo más mínimo el amor al arte, sus fanáticos y todo lo que la música metal supone. Y si lo dicen, es pura demagogia. Es más, ellos se aprovechan de esta incondicionalidad de los metaleros con sus bandas para cobrar precios que en ningún país de Sudamérica se repiten y crean zonas que ya lindan con la usura.
Saben muy bien que tras una sequía de conciertos en las últimas décadas en el Perú, estos últimos dos años y los que vendrán son propicios para sacarles el jugo a los fans.
Todos los seguidores estamos ávidos de conciertos y por eso estamos dispuestos a pagar lo que sea por ver a bandas de la talla de Megadeth, Iron Maiden, Kiss, Morbid Angel o ACDC.
Como el Estado no puede intervenir en el mercado en cuestión de precios, con lo cual no podemos aspirar a que las entradas sean más justas o acorde a la realidad económica del Perú, debemos por lo menos exigir nuestros derechos y recibir el espectáculo que se publicita con bombos y platillos. Para ello se puede recurrir a INDECOPI, donde existe una Comisión de Protección al Consumidor.
Un ejemplo, fue el concierto de Iron Maiden, donde el organizador señaló que la ‘Doncella de hierro’ haría su show completo. Es decir utilizaría toda su pirotecnia e infraestructura (5 eddies). Al final no hubo pirotecnia, solo hubo un Eddie, pero lo peor de todo, fue que la potencia del sonido no estuvo a la altura del artista.
El organizador se ha limitado a decir que la banda es responsable por la pirotecnia y que en lugar de hacerla llegar con anticipación, la hizo llegar el mismo día, por lo cual no se consiguieron los permisos del caso para utilizarla (falto la firma de siempre de los burócratas peruanos). ¿Y los eddies? ¿Y el sonido? Silencio total.
El año pasado, ocurrió algo similar con MEGADETH. La infraestructura que pusieron para el sonido en la Explanada del Monumental fue muy pobre. Y no hay excusa que valga, porque estuve en la zona más cercana al escenario. ¿También fue culpa de la banda?…Ojalá que el concierto de KISS, que es el martes en el Estadio Nacional, el organizador –el mismo de MEGADETH– se reivindique y que el espectáculo sea como el que sale en la publicidad.